José Ángel Agejas - 
                  Madrid.-
                    Jean Lauand, catedrático de filosofía 
                    de la educación de la Universidad de Sao Paulo, ha publicado 
                    un artículo en el que defiende 
                    que la canción «Let it be» de Paul McCartney, que da título 
                    al último álbum de los Beatles, es una oración a la Virgen 
                    María. 
                    Canción religiosa
                  
El ex componente del grupo ha explicado que el origen de 
                  esa canción está en una visión que una noche tuvo de su madre, 
                  María, muerta cuando él tenía 10 años. Pero la canción sigue 
                  en el disco a otra, titulada «Lady Madonna», dedicada a las 
                  mujeres trabajadoras de Liverpool, pero que, como el mismo 
                  Paul contó en una entrevista, la mayoría de las mujeres 
                  trabajadoras que él conocía en Liverpool eran católicas y 
                  había una gran vinculación entre ellas, sus hijos y la Virgen 
                  María, «por lo tanto, el concepto original era la Virgen María 
                  como símbolo de toda mujer, la imagen de la Madonna aplicada a 
                  la mujer trabajadora. Es realmente un tributo a la figura de 
                  la madre». Según este profesor brasileño, es desde esta clave 
                  como hay que leer la letra de «Let it be», que no significa 
                  sólo «déjalo estar», como muchos traducen, sino también «que 
                  así se haga», puesto que es en inglés la expresión del 
                  «hágase» de María ante el anuncio del ángel. La madre le 
                  repite a lo largo de la canción constantemente ese lema: «Let 
                  it be». La canción se iba a titular en un inicio «Mother 
                  Mary», y según él mismo confiesa, «la hice como algo casi 
                  religioso».
                  
Una letra espiritual
                  
Lauand hace una lectura del contenido de la canción. La 
                  primera estrofa empieza describiendo que «cuando me encuentro 
                  en momentos de tribulación, Mother Mary viene a mí, diciendo 
                  palabras de sabiduría (...) Y en la hora de la oscuridad ella 
                  se alza ante mí, diciendo palabras de sabiduría, susurrando 
                  palabras de sabiduría». Esas palabras, «Let it be», «hágase» 
                  según este profesor, expresan la sabiduría por excelencia de 
                  María, la imagen de toda mujer.
   Paul 
                  McCartney atravesaba en aquellos momentos por unas 
                  dificultades muy especiales, como él mismo confiesa en una 
                  entrevista: «Era un período muy difícil. John estaba con Yoko 
                  todo el tiempo, y nuestra relación estaba empezando a 
                  derrumbarse: John y yo atravesábamos un período muy tenso. La 
                  ruptura de los Beatles se asomaba en el horizonte y yo estaba 
                  muy nervioso. Personalmente era una época muy difícil para mí: 
                  las drogas, el stress, el cansancio y casi todo empezaba a 
                  pasarme su peaje.» 
                  
Música para la esperanza
                  
La canción «Let it be» concluye con una invocación a la 
                  esperanza para todos los que sufren: «Aunque se separen/ sigue 
                  habiendo una posibilidad de que comprendan/ de que habrá una 
                  respuesta, hágase».